diumenge, 3 de novembre del 2013

Un eclipse de sol híbrido



Los eclipses solares son fenómenos bastante frecuentes (sobretodo los parciales) que consisten en que la Luna tape desde el punto de vista del observador el sol. Hay varios tipos de eclipses. En eclipses anulares, la Luna se observa mas alejada y pequeña de lo normal, situandose delante del sol sin taparlo completamene, pudiendo observar así una especie de anillo brillante en el cielo. En los eclipses totales, la Luna oculta el sol de forma completa oscureciendo el dia. Aparte de estos existen eclipses poco comunes, llamados eclipses híbridos, como el que se ha podido observar este 3 de noviembre.



Este fenómeno consisite en el paso de una fase anular a una total del eclipse. Esto depende de como la sombra de la Luna cubre la Tierra y la ubicación del cono umbral que proyecta el Sol. Cuando la Luna está más alejada, el punto de intersección del cono umbral se situa por encima de la superficie terrestre, y hace que en la propia superficie, el observador note la diferencia de diámetros entre los dos astros desde su posición, visualizando desde su perspectiva el eclipse anular. Cuando la Luna está más cerca el cono umbral cubre una zona mas ámplia y en el centro se puede observar el eclipse total, y el equilibiro de distancia entre la Tierra y Luna, junto con la curvatura de la Tierra da lugar al eclipse híbrido.

En el sur de Europa, el eclipse se vió como parcial, siendo el mejor sitio de observación de todo el continente Canarias, donde el disco solar se ocultó un 30%.

El eclipse híbrido fue muy dificil de observar ya que fue visible en solo una franja del centro de África. Fue ahí donde se dirigió el investigador del instituto de Astrofísica de Canarias Miquel Serra-Ricart que para escojer el lugar correcto (Kenia) de observacón tuvo en cuenta no solo la visibilidad del eclipse sino también la posibilidad de buenas condiciones atmosféricas, la disponibilidad de agua, comida, carreteras transitables y la seguridad de su equipo.

Esta fue la tercera expedición de Serra-Ricart en el continente africano para observar un eclipse. En 2001 experimentó el asombroso silencio que se produjo en la ruidosa jungla, durnate los dos minutos que duró el eclipse en el norte de Zimbawe.

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